Suite Finca Montesqueiro
Nunca se buscó hacer una habitación. La idea fue crear un espacio de relax y descanso, con todas las comodidades y las mejores vistas y orientación, para que los novios disfrutasen tanto antes como después de la boda. El resultado es un espacio sin compartimentar, con dos alturas y con unas fantásticas vistas de la Ría de La Coruña que se aprecian desde cualquier punto gracias a un enorme ventanal, en el que se distribuyen cama, vestidor, zona de estar, baño, zona spa y una terraza en la que “ver sin ser visto”.
Lo que hace especial este espacio, no es sólo su contenido, el continente es espectacular: las grandes alturas y paredes inclinadas (que son el reflejo de lo que está pasando en el exterior), las dos alturas en las que desarrolla la Suite, que permiten introducir el “exterior” en el “interior”, son parte de su atractivo.
Este espacio está lleno de detalles orientados especialmente a los novios y todo el ritual que acompaña a una celebración de una boda: posee un gran vestidor en el que exponer y probar el vestido bajo un lucernario y un tocador iluminado con luz natural.
El trayecto desde la planta baja hasta la Suite es también muy sugerente. Unas escaleras de mármol envueltas en una gran celosía te conducen sutilmente hasta la entrada de la Suite. Un techo escalonado y blanco enfatizan esta subida, bañada por un lado con luz natural , y por otro, con una luz indirecta que acompaña el trazado del techo escalonado, haciéndolo más liviano.