Oficinas MN Program I
Los trabajadores de cualquier empresa siempre han anhelado un lugar así: un espacio donde desarrollar su labor profesional a gusto, sintiéndose cómodo en todo momento y disfrutando de los espacios comunes para enriquecer el trabajo. Estas han sido las premisas que hemos seguido. El resultado: unas oficinas espectaculares donde el mar, el césped y los materiales cálidos son los grandes protagonistas. Observando la distribución en planta nos damos cuenta enseguida del interés por los espacios abiertos que perseguían los clientes. Ni siquiera la zona de reuniones o el despacho del director se encuentran cerrados, sino que se encuentran accesibles desde cualquier lugar. En esta misma línea, los puestos de trabajo han sido dispuestos de manera longitudinal a lo largo del ventanal para aprovechar la entrada de luz natural y ofrecer a los empleados unas espectaculares vistas sobre el océano Atlántico.
La sucesión de espacios abiertos permite que la circulación sea ágil y directa. Sin perder la necesaria delimitación de cada zona. Así, las características técnicas del local nos obligaron a idear una solución alternativa, alejada de los tradicionales escalones, para los baños. Una pasarela en madera –reminiscencia de los antiguos accesos a los barcos- fue la solución y, además, un guiño al diseño. Otro de los espacios más llamativos del local es el cuadrilátero central, un lugar de reuniones pensado para que los creativos puedan desarrollar su labor en un entorno puro, alejando del estrés ordinario del trabajo. Construido también en madera, "el ring”, como ha sido bautizado, es una pieza única cuadrangular que domina el espacio central de la oficina.
La filosofía de la compañía, MN Program, una empresa gallega de software se traslada a sus propias oficinas. La apuesta por el medio ambiente, los materiales autóctonos y, sobre todo, el capital humano son los signos distintivos de la compañía. Por ello, sus oficinas cuentan con numerosos espacios dedicados al trabajo distendido. Una cocina chill-out, con televisión de plasma incluida; una despensa o el vestuario son pequeños lujos que favorecen un entorno agradable de trabajo. Si a esto sumamos unas vistas sobre el océano Atlántico y la calidez de los materiales encontramos como resultado un lugar perfecto para desarrollarnos como profesionales.
Otro de los puntos clave de ese proyecto técnico de oficinas son los materiales. Los acabados naturales en madera, sinónimo de calidez, se entremezclan con los satinados que recubren las zonas de trabajo. A todo ellos, se une un invitado especial, un césped artificial, llamativamente mullido al tacto, que no sólo recubre algunas zonas de la oficina sino que incluso trepa por una pared. La luz el último elemento que distingue a estas oficinas. En la zona de trabajo hemos optado por una iluminación técnica, suspendida a baja potencia para adaptarse a las necesidades de los trabajadores y aprovechar la fuente de iluminación natural. De esta manera, conseguimos además dotar de mayor transparencia al espacio. En las zonas de circulación la luz es focal y direccionable, mientras que en la recepción son lámparas de pie las que sugieren el aspecto urbano y exterior. Además, a la paleta de colores corporativos, negro y verde, dispuestos por toda la oficina, hemos añadido un tercer tono, el blanco, que contribuye a realzar las virtudes de la luminaria.