Hoy nos vamos a la República Dominicana, en concreto a la provincia de Samaná, cuya esencia se traslada al número 9 de la calle Rosalía de Castro de la Ciudad de Cristal. El antiguo local de una crepería alberga ahora en su interior todo el carácter de la costa del océano Atlántico, antes de llegar si quiera a la puerta del local podemos encontrarnos una zona cubierta con sillones de cestería tradicional amparada por un techo vegetal donde disfrutar de la grandísima variedad de cócteles que nos ofrece este lounge bar.

Ya habiendo cruzado las puertas del local podemos encontrarnos un espacio con miles de rincones llenos de detalles, desde las ténues luces que iluminan la barra hasta las plantas que repartidas meticulosamente por el local nos trasladan a una agradable y misteriosa selva de la época colonial y segmentan visualmente las zonas que podemos escoger para embelesarnos con los acabados de suelos, paredes e incluso mesas, hechas de diferentes terrazos especialmente diseñados para este espacio.

Un poco más allá podemos ver gracias a una pared entera de vidrio una parrilla de la que saldrán los deliciosos platos que podemos pedir desde la zona de comedor, donde sin duda los grades protagonistas son la mesa circular de madera de banano con champanera integrada y una barra de vidrio y metal dorado cuelga del techo como la protagonista de un gran salón, haciendo que las luces produzcan brillos y matices que se reflejan por las grandísimas hojas de las plantas que tiene al rededor.

Para sumergirnos más en las aguas samanenses una gran pared azul nos cobija y se contrapone con un papel pintado de cuidadísima calidad estampado con motivos vegetales alumbrado por los finas haces de luz que salen del botellero.

Y si nos apetece disfrutar de todo esto pero hacerlo en un espacio aún más íntimo podemos hacerlo desde el reservado que hay al término del local, un espacio presisido por una gran mesa y que aisla al visitante del ruido y de las miradas de los curiosos con sus carpinterías de un renovado estilo art decó y sus vidrios traslúcidos.

Es imperativo mencionar que los aseos del local son de una espectacularidad particular, pues se trata de una zona mixta con un tocador perfectamente cuidado cuyos espejos rodeados de bombillas y su lavabo que a modo de tótem presiden el espacio.

En resumen, si lo que estáis buscando es un local que os traslade directamente al otro lado del océano sin salir de A Coruña, os recomendamos encarecidamente Samaná, un local pensado y desarrollado para que el visitante disfrute de todo lo que le rodea, desde la distribución del espacio hasta la cuidada decoración, pasando por supuesto por la calidad de las materias primas con las que se trabaja en la cocina.

En resumen, si lo que estáis buscando es un local que os traslade directamente al otro lado del océano sin salir de A Coruña, os recomendamos encarecidamente Samaná, un local pensado y desarrollado para que el visitante disfrute de todo lo que le rodea, desde la distribución del espacio hasta la cuidada decoración, pasando por supuesto por la calidad de las materias primas con las que se trabaja en la cocina.